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Pablo Palazuelo (Madrid, 1915 – Galapagar, Madrid, 2007)

Panoplia I

1964

INFORMACIÓN DE LA OBRA

Gouache sobre papel, 78 × 58 cm

OTRA INFORMACIÓN

Firmado y fechado en el ángulo inferior derecho: «P. Palazuelo 64»

Pablo Palazuelo fue un artista estudioso y culto, sosegado y preciso, siendo uno de los primeros españoles que abrazó decididamente la abstracción como lenguaje plástico y, también, uno de los primeros pintores abstractos españoles reconocidos por la crítica francesa e internacional en los años cincuenta. Como pintor ha destilado un lenguaje personal basado en un uso muy particular de la geometría que caracteriza inconfundiblemente la totalidad de su obra.

En el trabajo de Palazuelo, el dibujo constituye la raíz de su pensamiento plástico; de él surgen las líneas, los planos, las figuras y los ritmos que, investidos de color, se convierten en enigmáticas pinturas plenas de fuerza. Detrás de todas las experiencias plásticas de Palazuelo hay un anhelo por alcanzar la belleza, una belleza apartada de las normas del clasicismo, que corresponde a una sensibilidad moderna, pero que el artista rastreó en los estratos más profundos del pensamiento, recurriendo para ello al estudio de la espiritualidad, la numerología, la alquimia y la psicología profunda. La práctica del arte fue para él una vía para llegar al conocimiento de aquello que no es posible nombrar, pero que el arte puede hacer visible. De alguna manera, Palazuelo intentó establecer analogías entre los métodos de los ocultistas y los procesos de creación artística, siendo esta una de las claves para desentrañar el sentido de su trabajo artístico.

Panoplia I y Lunariae corresponden a una etapa creativa en la que el primitivo orden geométrico, de origen tardocubista, se ha suavizado dando paso a unas líneas que se aproximan a las formas biológicas, donde la geometría genera un mundo de curvas quebradas y líneas divergentes. En esta geometría, los polígonos han redondeado sus ángulos y se han convertido en figuras de bordes suaves. Estos dos gouaches nos ilustran sobre las lábiles fronteras entre dibujo y pintura, donde la línea, que muestra el blanco del papel, perfila superficies en negro que cobran una inusitada fuerza.

Durante este periodo de creativa madurez, que abarca los años sesenta, la obra de Palazuelo estuvo muy influida por sus estudios sobre medievalismo, como lo demuestra el título Panoplia, así como por la alquimia, los textos de Raimundo Lulio y por la psicología de Carl G. Jung, lo que se hace manifiesto en el término Lunariae, empleado para dar título a una de las piezas de la Colección Banco Santander. Esta obra dio origen en 1972 a una carpeta de ocho grabados al aguatinta que fueron acompañados por otros tantos textos del poeta hermético austríaco Max Hölzer. [Javier Maderuelo]